Y de citas sobre lecturas
recientes o recordadas voy a intentar escribir algo. La culpa la tiene haber
devorado con las ganas y el entusiasmo del nostálgico el “England´s Dreaming”
de Jon Savage, un extenso recorrido por aquella breve historia que fue la de
los Sex Pistols. Entre otras muchas cosas, en él hay obligadas referencias a “Rastros
de carmín: una historia secreta del siglo XX” de Greil Marcus, del que precisamente
guardaba unas notas, de las que transcribo esta para darles paso después a la
última de mis referencias:
“A lo largo de la década de los veinte, los surrealistas buscaron una
poética que destruyese el simbolismo hipnótico de la iglesia. Luis Buñuel, que
de joven caminaba por las calles de Madrid disfrazado de cura, arriesgándose a
ir a la cárcel a causa de ese chiste privado, y que en 1930 rodó la película
blasfema L’Age d’or, experimentó su primera atracción hacia el surrealismo a
causa de una foto publicada en 1926 en la revista La Révolution surréaliste:
“Benjamin Péret insultando a un cura” Definida por Robert Hughes como “una de
las primeras performances de las que existe documentación, precursora de miles
de acciones igualmente triviales que serían registradas en Polaroid o en video
por los artistas norteamericanos de los setenta”, hoy en día la foto es casi
imposible de interpretar; un pie de foto más obvio habría sido: “Cura
lanzándole a Benjamin Péret una mirada obscena”. Todo lo cual prueba que, en el
momento y el lugar adecuados, las poéticas más marginales -en este caso la
foto ambigua- puede conducir a alguna parte; por ejemplo, a L’age d’or, que
todavía es capaz de cambiar la vida de algunos”.
Vale. Pues José Miguel Pérez
Corrales en “El oro del tiempo” nos habla del paralelismo entre esta imagen y
la actitud de Manuel Maria Barbosa du Bocage, poeta portugués de finales del
siglo XVIII con formación neoclásica, pero maneras radicalmente románticas. Se cuenta de él, y lo ilustra una colección de
lienzos pintados para decorar las paredes del Café Nicola en el corazón de
Lisboa, que hacía gala de una actitud satírica y provocadora con todo lo establecido, llegando a pasar alguna que otra temporada en las cárceles de la inquisición. Entre estos cuadros, pintados ¿casualmente? por los mismos años en que Péret se hizo la famosa
fotografía, encontramos que la actitud “performante” del poeta portugués no era muy
diferente de la del surrealista. Especialmente en aquél en el que se le representa en la obra que el autor denomina “Inimigo
de hipócritas e frades”.
Yo lo que veo en el cuadro es un anciano, que baja la cabeza ante las imprecaciones, y otro más joven que desearía contestar, pero sigue caminando sin decir nada.
ResponderEliminarLo que me llama la atención es que aunque el lienzo parezca más antiguo, está pintado pocos años después de hacerse la fotografía, y me pregunto si Fernando Dos Santos -el autor- conocía y empleó como referencia la obra del surrealista.
EliminarNo es casualidad esa inquina hacia los representantes mortales del ojo contenido en un triángulo; tantos siglos de desmanes en nombre del supuesto hacedor del Universo dan para esos y otros excesos, aunque tal vez los airados vengadores dirigieran su ira sin apuntar apropiadamente y las víctimas de sus improperios no fueran sino almas cándidas a quienes las aberraciones eclesiásticas del pasado les dolían tanto como a sus acosadores.
ResponderEliminar"Aquí nuestra colaboradora dándoles cera a los pretes"
Eliminarjuas
Una nota curiosa,un cuadro vasado en una perfomance surrealista
juas y rejuas
Mucha salud a ambos
Generalmente suele ser así, Una Mirada... y son quienes más se exponen los más vulnerables al férreo brazo de la justicia.
EliminarPara mi, que el pintor se vio la revista con la fotografía y le empleó como inspiración para reproducir un capítulo de la vida de Barbosa...
ResponderEliminarSalud!
Off topic:
ResponderEliminarhttp://www.ideal.es/granada/201706/08/granada-tendra-cuatro-nuevas-20170607220422.html
Habrá que tomar nota, aunque con lo inaguantable que es el esperar en aeropuertos y que exponerte a la desidia de las compañías aéreas con sus clientes es algo desesperante, creo que incluso desde aquí, merece más la pena ir en tren, coche o autobús...
EliminarEn coche o en autobús, pues tren no tenemos desde hace más de dos años. El monumento más visitado de España sin comunicación ferroviaria...
EliminarIncreíble como se promociona el transporte sostenible en este país...
EliminarDicen que sí tenemos, pero el sistema es que sale un autobús de la puerta de la estación y te lleva a Antequera (Málaga), en donde trasbordas al AVE que va a Madrid y a Barcelona. Comodísimo para quien va con maletas en una estación de subidas y bajadas y, además, el autobús tarda en llegar a Antequera lo mismo que luego el AVE en llegar a Madrid.
ResponderEliminarAlguien que conozco mucho y se dedica a estas cosas del transporte público, dice que las principales redes de transporte público de este país van de ninguna parte a ningún lado, y pensando más en llevar a la playa o al pueblo a sus excelencias que en facilitar la movilidad interna de propios y foráneos...
EliminarEso es muy cierto, señor de Batz, las carreteras van cruzando las vías romanas, en vez de paralelas, parecen para lelos
EliminarSalud Kisss y Kisss